Ave de paso.
Soy un alma fugitiva
que se negó a estar en una prisión,
soy la que le canta al amor libre
al amor sin ataduras ni compromisos.
Amo reflejarme en unos ojos
que me dejan ser como soy,
amiga de una bella flor,
de una planta, de un árbol,
de todo lo que Dios creó.
Me gusta besar unos labios,
que tengan sabor a libertad,
que le ofrezcan su carnosidad,
como alimento a esta ave de paso.
Soy feliz al contar con una piel
que me brinda cobijo y calor,
amanecer inundada de amor
sentirme libre en los parajes de su cuerpo.
Es mi gozo que existan unas manos
que curen mis heridas,
que me regalen sus caricias,
pero que no me exijan la vida.
Mónica.
Ruth Mónica Muñoz R.
derechos de autor
Chile.
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