miércoles, 11 de febrero de 2015

EN BUSCA DE UN NUEVO SOL.


EN BUSCA DE UN NUEVO SOL.

Camino por la vereda de la esperanza
voy en busca de un nuevo sol 
para que alumbre mis días.
He echado sobre mi espalda
lo negativo de mi autoestima 
y la carga de mis emociones fallidas.
Voy a luchar por mí y por 
los que me rodean, trataré 
de ser feliz, pese a la 
ignominia sufrida.
Voy en busca de un mundo mejor
donde no existan tantas miradas tristes, 
ni almas llenas de dolor;
Donde se eleven manos limpias
y se alce la vos del justo,
no la del tirano destructor.
Por mí y por los que me siguen,
caminaré con la mirada puesta
en un nuevo horizonte 
("Donde nacerá el Sol de Justicia, y en sus alas nos traerá salvación"
(parte extraída de las Sagradas escrituras))

Mónica.
Ruth Mónica Muñoz R.
Derechos de autor.
Chile.

AMIGOS.


Amigo.

El no es mas que un amigo
se sienta a mi lado y 
platica conmigo, yo lo miro 
embobada casi pierdo 
los sentidos, pero debo 
callar mis sentimientos guardar 
este dulce néctar en mi pecho.
No puedo decirle palabras 
bonitas que impliquen entienda 
lo que me provoca. De amigo 
fiel, pasó a ser alguien 
a quién necesito
Me hace falta su compañía 
y lo llamo a gritos, cuando 
siento su ausencia muero de frío. 
Él no es mas que un amigo,
pero me enamoré de él
y no puedo decírselo.

Mónica.
Ruth Mónica Muñoz R.
Derechos de autor.
Chile.

QUIERO VER A MI HIJO JUGANDO OTRA VEZ (Historia para reflexionar)

QUIERO VER JUGAR A MI HIJO OTRA VEZ.
(Historias para reflexionar)

Estabas él ahí, jugando como siempre, desparramando 
los juguetes por todos lados, ella, estaba cansada después 
de tanto laborar, se agarró los cabellos y comenzó a gritar, 
fue increíble, se convirtió de un momento a otro en una loca 
que zapateaba y le gritaba al niño para que ordenara el 
desastre que había causado, él, con ojos que casi se le salían 
de órbita y su pecho agitado, sin decir nada, agarro como 
pudo sus juguetes, sus lápices y sus cuadernos, y comenzó a 
arreglar el desorden.
Le gritó tanto le dijo que la tenía cansada, que lo único que 
deseaba era estar tranquila, sin nadie que la molestara. 
Al rato a él como niño ya se le había olvidado el susto que 
le causaron los gritos de su madre. Ya tarde casi a la hora 
de acostarse, comenzó a cantar muy alto, su vocecita se 
escuchaba por toda la casa, ella volvió a gritonear , le volvió 
a decir que se callara, que por favor la dejara en paz, que le 
dolía la cabeza con el ruido que él hacía: 
'Ándate a la cama de una vez por todas!
¡ no te quiero escuchar mas! fueron las palabras que la mujer 
dijo a su pequeño. El niño, un tanto asustado,se fue a la cama 
después de darle las buenas noches, y decirle, 
"MAMITA, TE QUIERO". 
El silencio que se produjo después de que el niño se acostó, 
le dio la calma que tanto necesitaba, ya no oía a su hijo 
correteando por todos lados, ¡que paz tan grande se siente!- 
dijo , cuando no está este niño dando vuelta la casa patas 
para arriba. 
Era verdad, un silencio enorme se produjo después de que 
el niño se durmió, fue tanto el relajo que la madre sintió que 
sin darse cuenta, se durmió sentada en un sillón. De pronto 
despertó porque su pequeño la llamaba, no se escuchaba 
muy bien, su vos la sintió muy débil, así que se apresuró y 
fue a la habitación, donde se encontraba el pequeño. ¡
¡Mamita! le dijo el niño, ¡Me duele mucho mi cabecita!
la mujer le tocó la frente y el niño estaba ardiendo en fiebre, 
se asustó un poco ya que desde que había nacido solo 
una vez antes le había subido fiebre; Después de darle 
un remedio, se acostó a su lado para acompañarlo el resto 
de esa noche, y se volvió a dormir. 
Cuando despertó horas mas tarde, lo primero que sintió fue
el calor que despedía el cuerpecito, de su pequeño, le tomo 
nuevamente la temperatura la temperatura, la fiebre le había 
subido tanto que casi alcanzaba los 42 grados, se asustó 
muchísimo, lo arropó y se vistió ella también para llevarlo 
al hospital. Apenas alcanzó a inscribirlo en la ventanilla y lo 
llamaron de inmediato para su atención. 
El doctor que lo atendió, indicó tomarle exámenes, trataron 
de hacer que la fiebre bajara pero no lo lograron, casi dos 
horas más tarde, los resultados de los exámenes estaban 
listos. El médico al revisarlos, miró a la mujer y miró al 
pequeño casi al mismo tiempo, el niño, permanecía acostado 
en una camilla casi en estado de inconsciencia debido a su 
alta temperatura. No lo podía creer, el médico basado en los 
resultados de los exámenes, le dijo que confirmaba el 
diagnóstico que él pensaba, "Meningitis" su hijo tiene 
Meningitis; No lo podía creer, horas atrás estaba jugando feliz, 
y ahora estaba grave debatiéndose entre la vida y la muerte. 
La madre deseo verlo nuevamente jugando, cantando y 
correteando por la casa, pero "no", estaba postrado en una 
camilla de hospital, tan inmóvil como nunca imaginó verlo. 
Rogó por su salud, derramó su corazón al cielo pidiendo 
por su mejoría, sabía muy bien, que no soportaría un golpe 
tan grande si Dios se lo llevaba. 
Más de un mes en el hospital, Dios no se lo llevó, en cambio 
le dejó a un pequeño con daño cerebral, que no puede hablar, 
menos cantar, y que no corretea por la casa ni desparrama sus 
juguetes por todos lados, y que no molesta con sus juegos
a su mamá, al que se tiene que dedicar siempre, porque su amor 
de madre se lo dice, y se lo exige.
Hoy, esa madre daría todo lo que fuera por ver a su hijo
paseándose por la casa, correteando tal como lo hacía antes,
ir a buscarlo al colegio, ayudarlo con sus tareas, y escucharlo
decir, "MAMITA, TE QUIERO" 
Pero, como tanto deseo estar en calma, en paz, y en silencio, 
el niño y el cielo, le dieron lo que le tanto deseo.
Hoy vive envuelta en el SILENCIO MAS ATROZ que no le 
permite escuchar, la vos de su amado hijo.
Quizás el cielo un día se compadezca de ella y le responda la
petición que cada noche hace a los pies de la cama de su hijo,
cuando derramando lágrimas de sangre ruega a Dios, por volver 
a ver, A SU HIJO JUGANDO OTRA VEZ.

TÚ QUE ERES MADRE, TÚ QUE ERES PADRE, DEJA 
QUE TUS NIÑOS SE DIVIERTAN, LA INFANCIA ES MUY
CORTA, Y ES LA ETAPA MÁS MARAVILLOSA POR LA 
QUE PASAN LOS SERES HUMANOS, ES, DONDE RESALTA 
LA PUREZA Y LA INOCENCIA CON LA QUE LLEGAMOS

A ESTE MUNDO.
Mónica.
Ruth Mónica Muñoz R
Derechos de autor.
Chile.

martes, 10 de febrero de 2015

SE FELIZ.


SE FELIZ.

Y de mi ausencia 
¿que me cuentas?
¿Me has extrañado,
o te has acostumbrado
a estar sin mí?
Me quedó claro cuando 
al marchar me dijiste
que no te olvidarías de mí,
pero es injusto para ti mi vida
que no intentes volver ser feliz.
Nada impide que rehagas tu vida 
ya no estoy junto a ti,
y no porque me juraste 
amar toda una vida
es preciso seguir
atada a un eterno sufrir.
Quédate con mi recuerdo
y del amor que yo te dí,
pero no dejes que se te 
escape la vida recordándome a mí
Agradezco el amor que has 
demostrado, pero déjame partir,
ese sentimiento tan bello
lo puedes compartir
Yo ya no existo, yo ya me fui, 
y aunque te cause dolor
debes aprender a vivir sin mí.
Desde el cielo te bendigo
y te digo... Se Feliz.

Mónica.
Ruth Mónica Muñoz R
Derechos de autor.
Chile.

ADIÓS.

ADIÓS.
Adiós, no te cueles mas en mis 
sentidos, ni vengas a visitarme 
cuando esté dormida.
No sé si te has dado cuenta 
que trato de escapar
de no volverme a enredar 
en un amor clandestino,
en un juego de nunca acabar 
donde marco el desatino
Sabes bien que tengo un amor, 
que duerme en la cama conmigo
y tú, atrevido seductor, 
haces en mi mente tu nido
y osas invitarme a volar 
por parajes desconocidos.
Se bien que te dejé pasar, pero
así como lo hice, hoy te despido
Adiós, espero no dar pie atrás, 
quiero olvidarme de ti, 
y esta vez es de verdad.

Mónica.
Ruth Mónica Muñoz R.
Derechos de autor.
Chile.

SI ME DEJAS.


SI ME DEJAS.

Si me dejas...
yo sabré tocar tu cuerpo
te trataré como a una flor
serás si tú quieres
mi dama, mi inspiración...
Te haré el amor en silencio
donde solo se oirán
los latidos de nuestros corazones
al ritmo de las cálidas caricias
que te entregaré...
Se escaparán mil te quiero
unidos a un suspirar
cada vez mas agitado,
y cuando nos comencemos a amar
ya no podremos parar...
Tu cuerpo...
Mi inspiración perfecta,
pedirá que mis dedos deslicen
sobre tu espalda sedienta,
mis manos atraparán tus deseos
y nos fundiremos en el beso
mas tierno y dulce que habremos dado.
Aprenderemos a conocer nuestra piel
por el hurgar y placer impulsados,
y nos fundiremos piel a piel
en la hoguera que comenzará a arder.
Si me dejas...
Te sabré querer
como nunca nadie lo a hecho,
y dibujaré en tu cuerpo
dulces notas, marcadas a fuego...
Si me dejas...
Te haré el amor
como  solo yo sé hacerlo.
Si me dejas...
Te compondré una canción,
para que nunca olvides
lo que pasó, entre nosotros dos.

Mónica.
Ruth Mónica Muñoz R.
Derechos de autor
Chile.

lunes, 9 de febrero de 2015

CAROLINA Y JULIÁN (Una pareja distinta a la que imaginaban)


Carolina y Julián.
(Una pareja distinta a la que imaginaban)

Por las bestiales muestras de su amor, fue por lo que ella se cansó.
Él le decía que todo lo que hacía lo hacía por amor, porque no quería 
compartirla con nadie, que su amor era tan grande, que su mundo
lo llenaba solo ella, y por cuidarla aveces se le escapaban unos golpes
pero no lo hacía con mala intención; Y así, volvía a caer nuevamente
Carolina, en las redes de las mentiras que Julián le decía.
Julián y Carolina se veían felices, recién cumplían ambos, 27 años
de edad, toda su adolescencia fueron novios, en el colegio como en
la universidad, nadie podría haber imaginado que un chico que
aparentemente adoraba a su novia y se desvivía por ella, se convertiría
en un futuro no muy lejano, en un hombre cruel y despiadado.
Fiesta de graduación: Carolina bailaba feliz con el que había sido uno
de los mejores compañeros de clase que ella tuvo, el chico que
siempre la ayudó cuando algo no le resultaba muy fácil de comprender
y como él tenía facilidad para captar ideas y facilidad en los trabajos que
les daban, siempre se ofrecía a ayudar a la chica; Julián, desde un rincón
miraba sin perder un movimiento lo que la chica hacía, con un poco de
trago en el cuerpo se revistió de valentía y fue donde la pareja bailaba,
sin medir nada, de un golpe en el pecho separó al joven de su novia:
Era la primera vez que Carolina lo veía así, tan molesto y además
agresivo. Tomando a su novia de la mano, la sacó a tirones de la fiesta.
No hubo tiempo para dar explicaciones ni pedir disculpas por lo sucedido,
simplemente a fuerza tuvo que seguir al chico que por primera vez,
estaba demostrando lo agresivo que podía ser. No le costó mucho
convencer a la chica, unos pocos lagrimones, y un tanto de caricias,
hizo cambiar del miedo y la decepción que Carolina sentía, a un estado
de aceptación, y de perdón.
Pasó casi un año de lo sucedido y Julián y Carolina, se comprometían
para casarse. Una mañana, cumplido el tiempo de noviazgo, ambos
se preparaban en sus respectivas casas, para ir a dar el sí, ante el
juez civil. Confiaba plenamente que quien iba a ser su esposo, la
cuidaría y la protegería y por sobretodo, la amaría, a las 10:30 de
la mañana de un día viernes, firmaban el compromiso por escrito
de guardarse respeto y fidelidad.
Sin que hubiera pasado mucho tiempo, Carolina empezó a conocer
mejor a su esposo, a ver que lo que aparentaba ser un buen matrimonio
no era más que infierno. Sin llevar ni siquiera 3 meses de casados,
Julián golpeaba por primera vez a Carolina, al punto de hacerla llegar
al hospital casi inconsciente, por los golpes recibidos: Motivo de
su llegada allí, "Una caída desde las escaleras de la casa" Nadie
imaginaba que un hombre que lloraba a mares al ver a su mujer
inconsciente, era el agresor. Los médicos preguntaron una y otra
ves que le había sucedido, pero ella por vergüenza y porque sus
padres estaba ahí, dio la misma versión que había dado Julián.
El tiempo seguía transcurriendo, y los maltratos se hacían más
reiterados, la chica casi no visitaba a sus padres, porque los golpes
la dejaban marcada y ella no quería que sus padres se enteraran de lo
mal que lo estaba pasando, y que se decepcionaran de su yerno adorado.
Los padres querían mucho a Julián, y nunca imaginaron que llegara a ser
capaz de maltratar así a su hija.
La joven se convirtió en una persona introvertida, la dura vida que
estaba llevando, no la dejaba ser feliz. Pese a todo y como lo reconoció
una vez estando muy mal anímica mente, a la matrona que la atendía,
justo el día que se le informaba que iba a ser madre, y que tenía
dos meses de embarazo, feliz porque en su vientre existía un ser,
se desahogaba con la especialista diciéndole que estaba siendo
victima de maltratos reiterados de parte de su esposo, pero, pese
a eso ella seguía amándolo. La matrona se dio el tiempo de
aconsejarla, le dijo que aunque tuviera que vivir sola, eso sería
mucho mejor para su salud y la del bebe que venía en camino.
Fueron tanto los concejos de parte de la especialista que la chica
salió de la consulta decidida a dar un vuelco en su vida;
Por su hija y por ella, esa misma tarde hablaría con su esposo y le
informaría que deseaba separarse de él. Llegó la tarde y Julián
regresaba al hogar, no a la hora de costumbre ya que se había
tardado por estar bebiendo junto a unos amigos. Carolina, después
de darle de cenar y hacerlo beber café para que se despejara, y
cuando notó que ya estaba mucho mejor, le pidió que conversarán.
No le contó lo de su embarazo, solo le dijo que ya no podía seguir
viviendo con él, que hasta que no cambiara y diera muestra fehaciente
de su cambio, ella se iba del hogar, que no podía seguir soportando
ser denigrada. Julián, enfurecido, tomó de los cabellos a la chica
y de una sola bofetada la tumbó en el suelo, no bastándole eso
la llevó a la habitación, donde abusó sexualmente de ella en
reiteradas ocasiones. La brutalidad de hombre despechado hirió
tanto por fuera a Carolina como por dentro, la penetración de parte
de un animal, porque así fue como se comportó Julián, la hizo
abortar ese mismo día a su hijito: Fue tal el maltrato que recibió
Carolina, que su rostro quedó casi irreconocible. En su propia
cama y sobre un charco de sangre, dejaba de existir a las 20:35
de la noche de un día 4 de julio de 2004.
A Julián le dieron diez años de presidio, pero por buen comportamiento
no alcanzó a estar recluido como merecía, ni siquiera seis años. El
alegato de su abogado fue, que él estaba pasando por un estado
de trastorno psicológico y que por lo tanto, no actuó estando bien
con sus cinco sentidos. Jamás a demostrado sentir remordimiento
por lo que hizo, aún sabiendo que su mujer llevaba en su vientre un
hijo suyo.
Para los padres y para quienes conocieron a Carolina, una chica
como ella, no mereció haber vivido una vida tan dura y menos
terminar sus días así, tronchados por quién ella siempre amó,
y el hombre que juró protegerla hasta la muerte.
Hoy, en una ciudad x, en el cementerio x, en una tumba x,
descansan los restos de Carolina X, acecinada por la mano
de Julián x.

(Escrito basado en hechos reales)
MUJER, HOMBRE, JOVEN, SEÑORITA, NO TE QUEDES CALLADA(O)
SI ESTÁS SUFRIENDO ABUSO POR PARTE DE TU PAREJA,
DENUNCIALA, ESTÁ EN JUEGO TU VIDA Y PUEDE QUE LA DE
ALGUIEN MAS.
Mónica.
Ruth Muñoz R.

DISCÚLPAME AMOR.


DISCÚLPAME AMOR.
(poema libre)

Culpable soy, por no ponerte atención, 
por dejar de lado el camino que habíamos trazado,
por dejar de ver en ti el valioso tesoro que tengo a mi lado.
No te equivoques, y si has pensado algo extraño,
hoy te digo amor mío "te has equivocado".
Mis manos aún guardan las huellas por el camino 
de tu piel transitado, mis labios, el dulzor de los tuyos,
mi piel, el calor que encontró en tu piel
cuando adolecíamos de muchas cosas
pero sabíamos arreglarnos en ese estado.
¿Te acuerdas amor? a mí no se me a olvidado
simplemente algo pasó, y no me atreví a contarlo, 
por mi aire de machista, por no parecer débil 
y acobardado, pero cometí un error 
y es bueno que lo hayas aclarado.
No sabes cuantas veces te quise hacer el amor, 
con el mismo ímpetu de años pasados, 
recorrer el mundo de tu piel, sumergirme 
en las tibias aguas de tu vientre, sentirme allí realizado.
Amor, perdóname las mil veces que te he fallado, 
el tiempo que te he abandonado y te has sentido sola
con el dolor en tu pecho clavado, 
Perdóname por dejarte sola en tus sueños, por dejarte 
quedar inmersa en una pesadilla que duró tantos años.
Perdóname, el no besarte por las noches,
tuve miedo lo reconozco, ya no hay motivos para ocultarlo.
Ahora siento más temor que ayer pero voy a superarlo,
por el bien de los dos, y por el amor que me has demostrado.
El miedo que me congeló y me hizo quedar estático, 
fue no poder corresponder a la emoción y al sentido de tu tacto, 
tuve miedo de no complacer a mi mujer, como lo hice en antaño.
Pero hoy, que te miro con libertad sabiendo que me amas 
a pesar de desengaños, me doy cuenta que el amor, 
te lo puedo demostrar con un detalle especial, o simplemente 
con una flor, la que nunca será tan bella... 
Como tú, Amor..

Mónica.
Ruth Mónica Muñoz R.
Derechos de autor.
Chile.