FANTASÍA.

Dime, ¿Como hago para 
no seguirte imaginando?
para detener mis fantasías 
que te traen cada noche a mi cuarto.
Como hago para que no 
se encienda el fuego, y 
me haga arder en la llama 
de un deseo tan intenso.
No sé si estarás consciente, 
de que cada noche te das cita 
en mi cuarto, que atizas 
el fuego con tus miradas 
impúdicas, y que me animas 
a seguirte el juego.
Que con tus manos me palpas
y con tu lengua me recorres,
que, con tu piel me abrazas, y 
con tu clímax me bañas.
No es una fantasía 
extraña, pero es un sentir 
que se amaña, toma 
dominio de mí,  y hace 
lo que le plazca.
Le ha placido venir,  hasta  
por las mañanas, y a hecho 
de mí su súbdita, dejándolo 
entrar en mi piel.
La verdad no sé que hacer,
porque fantasear contigo
es un divino placer, pero 
sé también que es algo que 
solo está en mi mente,
lo llevo en mi subconsciente 
y me hace enloquecer.


Mónica
Ruth Mónica Muñoz R
Derechos de autor
Chile