Esa sonrisa de aurora

traspasó mi alma solitaria

llegó el amor abrupta mente

sin que me percatara.

Sin darme cuenta ya le amaba

estaba como hipnotizada,

apenas balbuceaba 

en un estado de enamoramiento.

Me distrajeron su labios

la miel que brotaba de su boca,

quise con ansias sus besos

saborear hasta su última gota .

Fueron además sus manos

las que le brindaron tibieza

a mi corazón congelado

y reticente a enamorarse.

Mónica.

Ruth Mónica Muñoz R

derechos de autor.

Chile.